Uno de los efectos inmediatos que tuvo la contingencia sanitaria provocada por el SARS-CoV-2 fue el incremento exponencial en el uso de los dispositivos electrónicos. La tecnología ha jugado un papel fundamental en la adecuación de nuestras actividades a este nuevo estilo de vida. Mantener la comunicación con estudiantes, colaboradores, compañeros de trabajo e, incluso, familiares, es una necesidad que las plataformas virtuales y los medios electrónicos han cubierto de manera eficaz.


Aulas virtuales

Todo el sistema educativo a nivel mundial tuvo que migrar de un sistema de clases presenciales a una modalidad de clases virtuales o de educación a distancia. Con ello, el uso de los dispositivos electrónicos se volvió indispensable.

En nuestro país, la educación básica recurrió a las clases guiadas por programas transmitidos por televisión o radio durante los primeros meses de la pandemia. Sin embargo, una vez que los profesores fueron capacitados en el uso de las plataformas digitales, los estudiantes tuvieron que participar en la dinámica de la escuela virtual.

De acuerdo con el estudio “El impacto de las pantallas en la vida familiar durante el confinamiento”, una de cada dos familias se vio en la necesidad de comprar un dispositivo electrónico durante la pandemia, ya sea para las clases de sus hijos, el trabajo de los padres o el entretenimiento de la familia; el 49% de los compradores lo ha hecho para atender las tareas escolares.

El control de los aparatos electrónicos en nuestra familia es muy importante - artículo de educación y familia.
    1 de cada 2 familias se vio en la necesidad de comprar un dispositivo electrónico durante la pandemia

    Tiempo en pantalla

    El impacto inmediato es económico, pues la compra de una computadora de escritorio o portátil, una tableta o un teléfono inteligente, implica una inversión importante que la mayoría de las familias mexicanas no tiene presupuestada. Sin embargo, la mayor preocupación de los padres es la exposición de sus hijos al uso prolongado de estos dispositivos y el impacto que esto puede tener en su salud.

    Un informe de Lingokids, una app de aprendizaje de inglés que se dedicó a evaluar los hábitos de los niños en la red, afirma que el 87% de los pequeños aprendió en la pandemia a utilizar un dispositivo electrónico que antes no usaba.

    Es conveniente mencionar que el incremento en el tiempo de utilización de dispositivos electrónicos por los niños no solamente se debe al cumplimiento de las actividades escolares. Los menores también han incrementado el tiempo frente a las pantallas por motivos de entretenimiento, debido a la restricción de actividades fuera de casa.

    El entretenimiento digital de los menores ha aumentado considerablemente, alcanzando un promedio de uso diario de cuatro horas de lunes a viernes y cinco horas los fines de semana. Esto no solamente ha provocado conflictos entre padres e hijos, sino que también ha favorecido el aislamiento de los menores.

    Según datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), sólo un 15% de los niños usaba dispositivos electrónicos por más de 90 minutos antes de la pandemia. Este mismo dato incrementó al 73% de los niños durante la pandemia.


    “Malware”

    De acuerdo con información de la Fundación UNAM, debido al incremento en el uso de aparatos electrónicos y dispositivos móviles, para el año 2025 se estima que 90% de los jóvenes y niños que tienen actividades de visión cercana tendrán algún tipo de error visual, como hipermetropía, astigmatismo o presbicia; además, de ese porcentaje, cerca del 70% tendrá miopía.

    Estos efectos adversos pueden evitarse si se corrigen algunos malos hábitos en el uso de los dispositivos. En primera instancia, el tiempo prolongado de uso es un factor importante que debe evitarse. Se recomienda hacer pausas cada cincuenta minutos y, de ser posible, tomar descansos de 5 a 10 minutos para mirar algo a la distancia y así movilizar los músculos de enfoque dentro de los ojos; este ejercicio puede dificultarse en el caso de los niños, pues deben atender las indicaciones de sus profesores en cuanto los períodos de uso y descanso.


    Control parental

    Para los niños y jóvenes, la disponibilidad de sus padres siempre deberá ser mayor que la disponibilidad de los dispositivos electrónicos. No hay mejor control parental que tener a los padres siempre atentos de sus hijos. La presencia y el acompañamiento de los padres es fundamental en el desarrollo de los menores.

    El Papa Francisco describe esta misión al mencionar que “Un buen padre debe estar cerca de los hijos mientras crecen: cuando juegan y cuando se esfuerzan, cuando están alegres y cuando están angustiados, cuando se expresan y cuando callan, cuando se atreven, y cuando tienen miedo, cuando dan un paso en falso y cuando encuentran su camino”.

    Los niños y jóvenes reciben la instrucción escolar de sus profesores. No obstante, su educación se debe dar en el seno de las familias. “Es en la familia donde aprendemos a abrirnos a los demás, a crecer en libertad y en paz" (Papa Francisco).

    Complacencia digital de los padres con sus hijos

    Fuente: Kaspersky México

    • 48% de los niños mexicanos usa redes sociales.
    • 10% de sus padres desconoce la información que su hijo comparte.
    • 39% creó directamente sus cuentas y acceden a ellas sin la supervisión de sus padres.
    • 40% de los menores en México interactuó por primera vez con un dispositivo inteligente antes de los 6 años.
    • 71% obtuvo su primer smartphone o tableta personal antes de cumplir 10 años.
    • 15% de los niños pasa más de cuatro horas al día conectados a internet mediante un dispositivo móvil.
    El control de los aparatos electrónicos en nuestra familia es muy importante - artículo de educación y familia.
      Estudio sobre el impacto de las pantallas en la familia durante la pandemia